Acabo de darme cuenta que no había posteado nada en todo el día. Por alguna razón pensé que había escrito y publicado al mediodía, y dejé pasar el resto de la tarde dibujando, escuchando música, ordenando mi colección de juegos de rol y bajando más canciones para el Frets On Fire. Un día productivo en mi vida geek, salvo por el hecho de no haber posteado. Debe haber sido parte de La Conspiración Del Candado.
La Conspiración Del Candado es algo que un amigo y yo inventamos en medio de una resaca, y es la mejor explicación que tenemos para esos momentos en que simplemente no hay forma de encontrar las cosas que estuvieron ahí hace poco tiempo. Como cuando no encuentras la llave que estaba en el velador, para luego encontrarla debajo de la almohada. O las medias que desaparecen misteriosamente y nunca vuelven a ser vistas. O los lapiceros que nunca están a la mano. Ese día pasamos media hora buscando el candado que la noche anterior había estado en la mesa junto a mi encendedor, y que al final terminó estando debajo de una ruma de papeles que nadie había tocado en meses. Supongo que el candado a su vez forma parte de una conspiración más grande, junto con el jabón mutante que aterroriza los rincones de la casa de una amiga. Con el paso del tiempo, empezamos a culpar al candado de otros eventos fortuitos, como baterías descargadas muy pronto, café insípido, chicles en la suela del zapato y demás imponderables. Así que es posible que la confusión con el posteo de hoy haya sido culpa del candado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario