#71

Algunas veces me pregunto cómo será vivir en el espacio. Después de haber leído al respecto y haber visto los documentales y las entrevistas y todo lo demás, tengo una idea general de cómo es el asunto, pero una cosa es saberlo en teoría y otra cosa es estar ahí y vivirlo. Gravedad cero y se rompe la barrera entre arriba y abajo, y las limitaciones impuestas por la existencia del piso, aunque con el tiempo los músculos empiezan a atrofiarse por la falta de uso y el equilibrio se ve afectado porque ya no existe tal cosa como caer.

Siempre me ha fascinado la idea de viajar al espacio o al menos salir de la atmósfera terrestre y flotar en gravedad cero dentro de una estación espacial o al menos una cápsula. Cuando era chico tenía un póster del sistema solar con los nombres de los planetas y sus satélites naturales, además de imágenes y nombres de las sondas que en esa época recorrían los confines del sistema. Recuerdo que en una esquina de ese póster había un recuadro con los nombres y las fechas de las misiones de la NASA a la Luna, incluyendo los nombres de los astronautas que fueron en cada una, y en la otra esquina un corte esquemático del traje que usó Neil Armstrong cuando llegó a la Luna. Supongo que todo eso fue material más que suficiente para que durante muchos años quisiera ser astronauta, y también para dejar en mí el gusto por la ciencia real y la ciencia ficción.

#70

El olor del café me guía de regreso al mundo de los vivos entre las brumas de un sueño que no puedo recordar, aunque estoy seguro de que fue bastante extraño. Es una cosa rara cuando no puedo recordar mis sueños pero me quedan algunas impresiones generales, cosas como "era bonito" pero no sé que era lo que era bonito en mi sueño. Prefiero las escasas noches en que no sueño absolutamente nada, o al menos despierto sin recordar el sueño y no tengo esas impresiones generales. La impresión que me queda del sueño de anoche es que era extraño y azul, una suerte de azul que no logro ubicar en el mundo despierto. Tal vez sea mejor así.

Una gota de café cae sobre la hoja de papel doblado que he puesto como posavasos, y forma un pequeño charco oscuro e insondable que luego se va volviendo transparente y más tarde quedará convertido en sólo una mancha circular beige delimitada por un círculo oscuro, apenas una indicación de algo que ya no está ahí pero persistirá en la memoria mientras alguien recuerdo que esa fue una gota de café que cayó de la taza en una tibia mañana de otoño. Me pregunto qué vendrá en esta semana, si las cosas volverán a ser caóticas o si más bien seguirán en su cauce medianamente normal, si tendré otro sueño que después no podré recordar, si finalmente dejará de hacer tanto calor, si volveremos a tener una noche de lluvia y neblina que agite la magia en el aire.

#69

Y después de una semana bastante caótica que empezó más o menos, se puso bastante bien el jueves y terminó en la madrugada de hoy tras demasiado sudor y bastante dolor, el domingo me recibe con un calor medianamente soportable, y el olor del café recién pasado. Una de las cosas buenas de quedarse despierto hasta el amanecer probando cosas en la computadora, es que te da la posibilidad de tomar café fresco viendo cómo el sol se empieza a alzar en el horizonte. Con Alexiel libre de problemas, espero tener un mixtape para mi otro blog en un par de horas más, y finalmente podré concentrarme en escribir un poco más esta semana, mientras sigo buscando un ingreso fijo.

Por alguna razón (mirada acusadora a la tarjeta de video), esta semana no he hecho casi nada fuera de los posteos en este blog, pasar tiempo con la unidad madre, poner algunas cosas en el twitter y alrededor de una hora con la guitarra, aunque eso fue más que nada una práctica de velocidad para desahogar un poco la frustración de no poder dar con el origen del problema (otra mirada a la tarjeta de video), así que no salió nada productivo de ahí. En fin, supongo que el domingo está yendo bastante bien hasta ahora como para seguirme preocupando, así que dedicaré lo que queda del día a pasarla bien escuchando música, escribiendo un poco y pasando el rato con Fani. Tal vez logre convencerla de jugar Dungeons & Dragons.

#68

El miércoles por la tarde, mientras yo estaba en Lima esperando que empiece el concierto de Iron Maiden (como lo describí en mi posteo anterior), mis padres hablaron con un electricista y le explicaron los problemas que habíamos tenido con algunos artefactos en el tercer piso, donde está ubicado el estudio. Una revisión del cableado determinó que si bien necesita ser cambiado lo más pronto posible (es decir, en cuanto haya dinero suficiente), por el momento era suficiente con poner una nueva caja de fusibles. La idea de cambiar los cables no es nueva, pues ha venido dando vueltas desde hace más de un año, pero el costo es lo que ha evitado que lo hagamos hasta ahora, y lo seguirá evitando aún por un tiempo más.

Alexiel sufrió un nuevo desmayo en la noche, y luego ya no quiso volver a funcionar por más de cinco minutos antes de volverse a desmayar. Lo bueno es que finalmente apareció un mensaje de error, lo cual es bueno porque al menos te da una idea de lo que pueda estar mal, y eso ya es la mitad de la solución. El mensaje decía que la memoria había disminuido, así que empecé a probar los módulos de memoria RAM, y finalmente logré aislar el problema: la tarjeta de video. La saqué y conecté el monitor en la tarjeta integrada y las cosas han estado funcionando bien desde entonces. Así que ahora todo ha vuelto a un cauce más o menos normal en el estudio, salvo por la ausencia de la tarjeta de video.

#67

Han pasado ya más de veinticuatro horas del concierto de Iron Maiden en Lima, y aún me parece que estoy despertando de un sueño que tardó toda una vida en hacerse realidad. El calor de la gente, la energía liberada, la presencia de la banda en el escenario (no me refiero a la presencia física, sino a la forma en que llenan cada rincón con sólo estar allí de pie), la pulcritud de la performance, todo ha quedado grabado dentro de mí como uno de los mejores momentos de mi vida, y algo que con orgullo le contaré a mis hijos y a mis nietos.

El día empezó tranquilo después de haber encontrado una posibilidad no contemplada para los problemas de Alexiel: el cableado eléctrico de la casa tiene más de treinta años y podría estar produciendo interrupciones en el suministro de energía no sólo del estudio sino de todo el piso. En fin. Una vez recuperadas las esperanzas de no tener que reemplazar la motherboard, me puse de acuerdo con Fani para acompañarla a su clase de los jueves y luego irme a buscar a Hugo e ir al concierto. No tuve dificultades para encontrar una habitación para pasar la noche, así que dejé mi mochila con una muda de ropa, mi cuaderno, lápices y otras cosas, y emprendí el camino hacia la casa de Hugo. De allí partimos, cervezas en mano, hacia el Estadio Nacional para el calentamiento previo que el cuerpo necesita antes de un concierto. Es cierto, no es estrictamente necesario, pero es una suerte de tradición para la gran mayoría de aficionados. Mientras esperábamos en los alrededor, me encontré con un viejo amigo al que no había visto desde los primeros años de universidad, y ahora lo encontraba convertido en padre y aún fiel a su tradición metalera. Después de un par de horas partimos en busca de algo que comer para tener fuerzas. Nada más peruano que esperar el concierto de Iron Maiden comiendo salchipapa en un huarique y escuchando Bareto en la radio.

El concierto fue una explosión continua de gritos, llanto, canciones coreadas a todo pulmón y a pecho descubierto, energía que se había acumulado durante los minutos, horas, días, meses e incluso los años de espera. La gran mayoría habíamos pasado la vida entera con la esperanza de verlos en vivo al menos una vez. Aunque no pudieron hacer todo lo que querían, la banda se entregó por completo, al igual que la marea humana que se agitaba a sus pies. Se despedían con la promesa de volver en dos años para saldar la deuda que ellos consideran haber dejado pendiente. A mi lado un hombre de unos cuarenta años, mechones de plata en las sienes, llevaba sobre los hombros a un niño de unos diez años, y las facciones de ambos los delataban con padre e hijo. Los ojos perlados de lágrimas y emoción los hacían hermanos. Afuera, la marea humana se dividía en hordas que luego tomarían las calles en busca de algún buen lugar para comentar el sueño hecho realidad.

#66

No sé si podré postear esto a tiempo. He pasado todo el día tratando de hacer que Alexiel funcione sin problemas, y hasta ahora todos los intentos han sido en vano, pues la computadora se apaga intempestivamente. Pensé que el problema era alguna falla en la motherboard, así que empecé a hacer varias pruebas, y a media tarde parecía que el problema era un malfuncionamiento del conector de red, porque de pronto dejó de funcionar. Me quedó flotando la pregunta de cómo es que eso podía apagar la computadora, pero si era un corto podía estar alterando el flujo de corriente en la motherboard, así que de alguna forma tenía sentido. Compré una tarjeta de red para no tener que usar el conector de la placa, pero de todas formas el problema persistió. Y después Alexiel volvió a reconocer su propio conector de red. Empecé a mudar los discos duros hacia Bethany, pero Bethany ha desarrollado algún problema propio, porque arroja un error de lectura del disco que no había sucedido hasta ahora. La última cosa que estoy probando antes de tirar la toalla es cambiar de enchufe. Estoy probando ahora con el enchufe que está en la pared opuesta, al otro lado del estudio y cerca de la TV. Hasta ahora lleva funcionando más de quince minutos, pero no tengo acceso a Internet porque el modem está hasta el otro lado del estudio. Trae un cable hasta aquí para una conexión temporal será fácil, pero si fuera que Alexiel funciona sin problemas en este enchufe, entonces tendría que cambiar de posición todo el estudio.

#65

Pasar tiempo con la unidad madre (es decir, con mi vieja) es bastante más entretenido de lo que cualquiera pensaría. Una de las razones para eso es que ella también es geek y le gustan muchas de las cosas que me gustan a mí, incluyendo la ciencia ficción, libros (sobre todo los de ficción histórica), mitología, extraterrestres y cosas sobrenaturales. De tal palo tal astilla, como dicen, pues tanto la unidad madre como la unidad padre son geeks de otra época. En el caso de papá sus inclinaciones van más bien por el lado científico, la política y la filosofía, aunque últimamente ha venido demostrando un creciente interés en los programas acerca de fenómenos paranormales, supongo que por influencia de mamá. Sea como sea, ayer pasé casi todo el día con la unidad madre (lo cual explica porqué no escribí nada aquí y ahora tenga que escribir el doble, además de hacer el mixtape de la semana para mi otro blog), y realmente lo pasé bien.

Cambiando de tema, las baterías de mi teclado inalámbrico finalmente murieron el día de hoy, hace alrededor de media hora para ser específicos, después de más de dos años de servicio. En contraste, las baterías del mouse tienen que ser reemplazadas cada quince días de uso. Eso convierte al cargador de baterías y los cuatro pares de baterías recargables en una de las mejores inversiones que he hecho hasta ahora. Hablando de cosas relacionadas a Alexiel, hoy día le di una revisión general porque el fin de semana se apagó sin previo aviso un par de veces, y recién después de desarmarla, limpiarla por dentro y por fuera y volverla a armar, me di cuenta de que si bien he reemplazado la fuente de poder por una nueva y más poderosa, el cable de alimentación (el que se conecta al tomacorriente) seguía siendo el mismo de hace dos fuentes, es decir tenía más de cuatro años de servicio inmisericorde, lo cual lo convertía en un nuevo sospechoso de los inexplicables desmayos de Alexiel. Abrí uno de los cajones de piezas extra y encontré tres cables de alimentación, dos nuevos y uno usado, así que tomé uno de los cables nuevos, lo instalé y Alexiel no se ha desmayado en las últimas cuatro horas. Espero que eso haya solucionado definitivamente el problema, pero no puedo alejar de mi mente la idea de que pueda ser un problema de la motherboard, lo cual complicaría la situación ya que si la reemplazo tendría que ser por una mejor con potencial para más cosas (de preferencia una con más conectores SATA y más puertos PCI express para una futura Alexiel con dos tarjetas de video), y no puedo costear una nueva motherboard hasta que vuelva a tener un trabajo estable y haya cobrado al menos dos sueldos. De todas formas es una buena excusa para chequear las páginas de mis tiendas favoritas, así como para dar una vuelta por Wilson el viernes por la mañana antes de volver a casa después de haber dormido un poco tras celebrar el concierto de Iron Maiden con los amigos en un bar.

#64

Cuelgo el auricular después de un par de minutos de diálogo casi sin emoción. El mundo es de un color aún no del todo definido, aunque parece tener rastros de algunos colores familiares, unos brillantes y otros no tanto, todos visitados en vidas similares que antecedieron a esta. El tiempo ha logrado escurrirse entre los dedos del universo como arena que se pierde en el espacio y ha traído de regreso a la memoria el olor de una noche de verano pasada ya la medianoche, y el alma se pierde navegando entre sueños. En el cielo de Urano las lunas siguen pasando como ecos de una luz lejana reflejada en la incertidumbre. El timbre del teléfono me trae de regreso al zumbido de los discos duros y el olor de una taza de café.

El almuerzo y la tarde han ayudado a quitarle un poco de drama, pesadez y surrealismo al día, incluso el calor dejó de ser tan incómodo para volverse sólo una presencia indeseada más o menos fácil de ignorar. Las ideas medianamente creativas han empezado a fluir nuevamente después de un par de días en el limbo, esta vez de forma más ordenada, y aunque no podré aprovecharlas todas en lo que queda del día, de todas formas les estaré dando buen uso durante la semana mientras espero un par de emails que posiblemente no lleguen nunca, pero debo esperarlos de todas formas. La noche recién empieza, y creo que esta vez terminará más bien temprano, justo después de haber tomado nota de todas las ideas.

#63

Hace alrededor de trece horas despertaba después de una noche más bien intranquila. El sol se anunciaba a través de la ventana, pero el cuerpo me pedía que no saliera de la cama en un buen rato. Hace doce horas finalmente salía de mi habitación para ir al baño, lavarme y bajar a desayunar. Hace poco más de diez horas horas estaba esperando una llamada que luego me dejó pensando en algunas cosas, todas coherentes, pero no todas agradables. Hace nueve horas veía Natural Born Killers y recordaba la primera vez que vi esa película cuando todavía rentábamos cintas de VHS en la tienda de videos. Hace seis horas estaba llenando de comida la taza de mi gato y seguía pensando las mismas cosas, pero trataba de dejar de lado las desagradables. Hace cuatro horas estaba saliendo de casa con un caramelo de menta en la boca y sentía el viento fresco acariciar mi frente mientras caminaba dos cuadras hacia la plaza. Hace tres horas retomaba la película desde donde se había quedado hacía unos días. Hace dos horas la película cambiaba de escenario y luego la trama daba un giro inesperado. Hace una hora alguien puso pausa en la película y salió de la habitación y la historia se quedó en suspenso hasta que regrese. Hace diez minutos tomé la botella de whisky y empecé a servir. Dentro de un par de horas posiblemente estaré ebrio, tratando de no pensar más. Cuando despierte mañana tomaré el teléfono y trataré de averiguar de qué color es el mundo.

#62

Contemplo la pared vacía detrás de la computadora, y busco en mi mente algunas ideas para llenarlo. Lo primero que viene a mí es una imagen pintada con aerosol negro y la ayuda de una plantilla, posiblemente algo basado en alguna fotografía, como las cosas que hace Banksy, y casi de inmediato empiezo a pensar en cuándo empezar, cómo hacerlo y qué imagen podría quedar mejor. Sin embargo, la siguiente idea me parece mejor. Ayer mencioné que quería poner un par de repisas más en el estudio, y ahora se me ocurre que podría poner una repisa bastante larga en esta pared vacía detrás de Alexiel, para poner allí los discos duros, el modem, quizás una lámpara y también algunas otras cosas que vengan más adelante. Creo que eso quedaría mejor que la pintura, aunque de todas formas tengo ganas de pintar en las paredes del estudio, o al menos poner un cuadro o algún poster para que ya no se vean tan vacías. Mientras mastico esas ideas para ver qué sale, me viene también la idea de escribir una historia corta de fantasía épica con trazos de ciencia ficción, y de pronto recuerdo que hace años leí en una novela una descripción de una casa cuyas paredes estaban decoradas con historias escritas en árabe, y me quedó dando vueltas la idea de decorar una sala (quizás una biblioteca o un estudio) con palabras y quizás con una historia. Me pregunto qué podrá salir si mezclo todo esto en un sólo proyecto de mediano plazo.

#61

Otro día que se pasa sin mayor productividad. El día empezó casi una hora antes de lo normal, es decir, casi a la hora en que debería empezar, y empezó con una llamada inesperada y un cambio de planes de última hora que me dejó con todo un día a mi disposición y varias ideas nuevas dando vueltas por mi mente. La mañana después del desayuno fue realmente productiva pues pude hacer todas las pequeñas cosas que quería hacer antes de almuerzo. Después del almuerzo las cosas simplemente se estancaron. Supongo que tuvo mucho que ver el hecho de haber pasado casi tres horas fuera del estudio, cuando se suponía que iba a ser sólo una hora, pero la incompetencia de algunos termina por arruinar el día de otros. las últimas dos horas y media han sido sólo tiempo muerto que he pasado entre revisar foros y releer comics, pues al parecer la paralización a media tarde fue suficiente para bloquear la creatividad que venía aumentando desde ayer. Ahora tengo que buscar la forma de reactivarla.

Cambiando de tema, estoy considerando la posibilidad de poner un par de repisas más en el estudio, para tratar de reducir la tugurización de la repisa de videos, sacar de la mesa el modem y los discos duros externos, y además tener espacio libre para futuras compras. Tal vez podría comprar también una silla más alta y más cómoda. Claro que todo eso depende de que pueda ganar el dinero necesario, pero siempre es bueno tener un objetivo.

#60

Algunos días realmente se pasan sin que uno se de cuenta, mientras otros parecen no terminar nunca. El tiempo es así, incluso más relativo que cosas como "tibio" o "un poco". En fin.

Esta semana finalmente decidí dejar la libertad del freelancing para buscar un ingreso fijo que me permita pagar las cuentas sin preocuparme demasiado. Realmente espero encontrar algo pronto, más que nada por cuidar la salud mental, pues las medidas de austeridad me permiten sobrevivir un par de meses más antes de empezar a consumir los ahorros, pero desde hace un par de días me han estado viniendo docenas de cosas a la cabeza. La mayoría de ofertas de trabajo que han aparecido no han resultado muy convincentes, y la que estaba dispuesto a tomar (la paga era muy buena, a pesar de no ser realmente lo que quiero), al parecer se ha quedado en el aire. Eso son dos posibles trabajos con buenos sueldos que se han quedado en el aire en menos de un mes, y ahora tengo preguntas. Me pregunto cómo irán a ser las cosas más adelante, si esta situación seguirá por mucho tiempo, si tendré que hacer algunos cambios más, si tendré que conformarme en lugar de seguir buscando, si todo mejorará, si tal vez me estoy preocupando demasiado, si debería tener más fe. No cuestiono mi capacidad de supervivencia y adaptación, y nunca la cuestionaré, porque realmente he pasado por cosas peores y he salido bien. El problema es que esto realmente no se parece mucho a lo que yo tenía en mente, y eso está trayendo las preguntas.

#59

El día está nublado, algo gris, más bien tibio y por momentos parece amenazar lluvia. Sin embargo, no me parece que sea un día triste, más bien es un día para dedicarlo a actividades más personales y eventualmente disfrutar de una taza de café bajo la lluvia, si es que llega a llover. Leer un poco, hacer algunos bocetos, quizás ver alguna película (Tombstone y Unforgiven han estado dando vueltas por mi cabeza desde hace un par de días) y escribir algo. La mañana ya pasó entre tazas de café, revisar y responder el email y leer algunas noticia, así que aprovecharé el almuerzo para ver una película y después escribiré un poco antes de ir a ver a Fani y hacer algunos bocetos en su casa. Podría ser divertido.

Recién me doy cuenta que durante la mañana he ido anotando cosas sin darme cuenta, pequeños garabatos en el cuaderno que siempre tengo a la mano en el estudio, además de algunas páginas que he ido abriendo en pestañas adicionales, y todo parece señalar que mi creatividad se ha disparado bajo este cielo gris con amenaza de lluvia. ¿Será acaso que soy más creativo mientras menos veraniego sea el clima? ¿Será mi creatividad inversamente proporcional al clima? Es posible, después de todo siempre he preferido los climas fríos, y me siento más cómodo trabajando en ambientes frescos o ligeramente fríos. Me parece que es una buena razón para pensar en mudarme a un clima más frío en el futuro, y ahora que lo pienso, Canadá podría ser una buena opción. Mientras tanto, celebro la llegada del otoño y espero que el invierno no se demore mucho en caer.

#58

En agosto del año pasado decidí que finalmente era hora de aprender a tocar guitarra de una buena vez, así que con ayuda de un amigo compré mi Ibanez GRX20, un amplificador Fender y algunos accesorios. Aunque han pasado ya poco más de seis meses, mi repertorio de acordes es bastante limitado (powerchords y más o menos doce acordes normales, pero sólo cuatro me salen bien), y mi habilidad como guitarrista no podría ser calificada siquiera como decente, resultado de la combinación de poca práctica y una mano izquierda que aún es más bien torpe. La velocidad de mi mano derecha ha aumentado considerablemente, sobre todo porque una parte de mi escaso tiempo de práctica está dedicado a subir el volumen y la distorsión y tocar tan rápido como sea posible. En general podría decirse que ya puedo tocar punk y hardcore, pero aún sigo lejos de poder tocar heavy metal o blues, y debido a eso (y a la situación económica) no he comprado todavía los pedales de efectos.

Lo que ha venido aumentando exponencialmente es la curiosidad por las guitarras en general, efectos, amplificadores, y básicamente toda la parafernalia tecnológica asociada. Anoche me dejé llevar por la curiosidad e hice algunos experimentos con los emuladores de efectos que tengo en la PC. Descubrí que, aunque resulte frustrante el aún no poder tocar bien más de cuatro acordes, el hecho de ponerlos en la PC y pasarlos por varios efectos distintos y en general hacer algo que ya viene sonando a música resulta bastante gratificante, compensa el esfuerzo y anima a seguir adelante.

#57

Sigo pensando en ampliar la biblioteca, y la lista de libros que quiero conseguir sigue creciendo aunque no tengo los fondos para costear la mitad de la lista. Es decir, tengo los fondos para costear posiblemente la lista entera y un poco más, pero tengo que decidir entre comprar libros suficientes para leer hasta mediados del próximo año, o pagar las cuentas de los próximos meses. Lo cual me lleva a pensar en aceptar alguno de los trabajos que me han venido ofreciendo últimamente, aunque la verdad es que yo preferiría seguir de freelance (siempre y cuando se volviese algo más regular).

¿Sacrificar la libertad del freelancing a cambio de un ingreso fijo mensual? Es una decisión más o menos difícil, al menos para mí, porque ya me había acostumbrado a esta libertad, no tener que depender de un horario estricto y poder hacer básicamente lo que quiera cuando quiera. Si vuelvo a un horario fijo, tendría que dejar algunas cosas para los días libres, y tratar de acomodar algunos de los proyectos en las pocas horas que me quedarían diariamente. Sin embargo la oferta que recibí hace un par de días es bastante interesante y podría ayudarme con varios de esos mismos proyectos, incluyendo ampliar la biblioteca. Además un ingreso fijo me libraría de algunas preocupaciones y me dejaría despejado para pensar en otras cosas. Tal vez vaya siendo hora de volver a dar algunas concesiones a cambio de estabilidad económica y mantener el nivel de vida y la cordura.

#56

Dentro y fuera, alrededor, sonidos que forman muros que contienen la existencia de un mundo extraño hecho de los ecos de cientos de conversaciones inconexas, voces que caen del cielo como gotas de lluvia sobre un paisaje nuclear e edificios abandonados habitados por los sobrevivientes de un apocalipsis que todos prefirieron ignorar. Un sonido extraño abre una brecha en uno de los muros, un agujero de estática que me permite salir y navegar en el vacío. Despierto.

Después de eso el sueño regresó a un cauce más o menos normal (todo lo normal que puede ser un sueño), algunas escenas nuevas con escenarios repetidos y caras conocidas. Me pregunto si habrá realmente alguna conexión entre mis sueños, si los del lunes y martes estarán relacionados con los del miércoles y el jueves, y si estos a su vez tendrán algo que ver con los de la semana pasada, si quizás estarán formando una historia, una suerte de universo alterno que de desarrolla dentro de mi mente sin que yo tenga control alguno sobre él, un universo que sólo puedo visitar cuando duermo. Me pregunto también si mis sueños estarán relacionados con los de otros, es decir, si de alguna forma nuestros subconscientes forman una suerte de universo colectivo, si podremos comunicarnos unos con otros mediante sueños, si habrá alguna forma de navegar entre los sueños para saber qué están soñando los demás. Supongo que tendré que leer un poco al respecto, es una buena razón para seguir ampliando la biblioteca.

#55

Pasar una mañana entera leyendo era algo que casi había olvidado, y que por cierto debería hacer más seguido, sobre todo después de algunos días bastante caóticos. Posiblemente haya tenido también algo que ver el hecho de haber estado totalmente desconectado durante casi todo el día, lejos del e-mail, rss, Messenger y Twitter. Desconectarme después de terminar y enviar la traducción ha sido como una desintoxicación, y me ha permitido avanzar bastante en algunas lecturas que había tenido medio abandonadas, así como el proyecto de un dibujo diario (todavía estoy poniéndome al día con los dibujos que me debo a mí mismo y que ya pasan la veintena, pero el proyecto sigue en pie). Claro que ahora tengo un montón de noticias por leer en el rss, pero creo que sólo voy a leer los titulares esta vez, quizás separando un par en la carpeta de "para después" para poder leerlos con mayor atención y quizás escribir al respecto el domingo, pues mañana promete ser otro día completamente desconectado.

Afuera, una lluvia ligera parece tratar de barrer las cosas que la insistente lluvia de la tarde no terminó de llevarse. Las nubes apenas ocultan la luna como un velo que apenas oculta un rostro radiante. El viento fresco se filtra por la ventana, trayendo consigo el olor de la tierra mojada y un lejano olor a canela, quizás alguien horneando un pastel para mañana, o quizás sólo un aroma que brota del aire mismo como un bálsamo para un soñador que trata de recuperar sus energías. Desde aquí se agradece. Hora de ir a dormir.

#54

Nota: Este es un posteo de al menos setecientas cincuenta palabras --doscientas cincuenta por cada día que no postee nada, y las doscientas cincuenta de hoy. Eso sin contar esta nota.

Y bueno, hay una explicación para la ausencia de posteos los últimos dos días. He estado traduciendo. Normalmente eso no sería razón suficiente para dejar de escribir o hacer otras cosas, pero el problema surgió cuando quemé la energía que ya no tenía y terminé traduciendo a menos de la mitad de mi velocidad normal.

El problema comenzó realmente el lunes por la tarde, cuando la salida al cine que habíamos planeado para el martes se complicó porque a la mamá de Fani le dio pataleta. No es que se enfermara de algo, sino que le dio uno de esos ataques de cerrazón mental que algunas veces le da a las madres, sobre todo cuando han pasado años mal acostumbradas a que se haga su voluntad y a decir cualquier cosa sin que nadie les de la contra. Yo había pensado traducir unas cuatro horas y luego irme a dormir un poco temprano para no estar cansado el martes y poder hacer unas compras antes de ir al cine y en general pasar un día juntos de un lado para otro. Mientras tratábamos de encontrar una solución por teléfono, se fue la luz, así que no pude hacer nada más por un par de horas, y el cronograma de la traducción empezó a postergarse y mutar. Cuando volvió la luz me encontré con Fani para poder establecer una estrategia que nos permitiese superar la pataleta maternal. Después de un par de horas volví al estudio con la idea de avanzar unas cuatro páginas para empezar a traducir en serio al volver a casa el martes, una sesión maratónica frente al teclado hasta terminar la traducción el miércoles por la tarde y luego tener libre el jueves para los planes que ya habíamos hecho.

El martes por la mañana salí de casa más temprano que de costumbre, para poder hablar un poco con la suegra antes de salir. La charla matutina con la mamá de Fani no resultó nada productiva, sobre todo porque la futura suegra se puso en un estado mental de "barrera infranqueable", aunque realmente sonaba tan coherente como los discursos comunistoides que sueltan dos frases, luego llegan a una conclusión que en realidad no tiene nada que ver con lo que se dijo antes (en el mejor de los casos está relacionada tangencialmente con algo que duras apenas fue mencionado tangencialmente en la primera frase), luego empieza a contradecirse sin darse cuenta, y al final espera que le den la razón sólo porque es la mamá. Ni siquiera a mi madre le doy la razón cuando no la tiene. Desafortunadamente, aunque siempre se puede dialogar, no hay forma de razonar con una persona que sólo quiere que de le den la razón. Sin embargo, por alguna razón que no acabaré de entender, lo intenté durante casi una hora, antes de recurrir al viejo truco de hacerle creer que estaba en lo correcto. Finalmente pudimos salir tres horas después de lo planeado, almorzamos tarde, no alcanzamos la peli pero vimos otra que resultó bastante divertida, y en la noche regresé al estudio después de dejar a Fani en su casa sana y salva. Encendí a Alexiel y empecé a traducir, manteniéndome despierto gracias al café hasta que la cabeza me empezó a doler y los ojos me ardían demasiado. Había traducido alrededor de una página por hora, muy por debajo de mi velocidad promedio.

Había quemado demasiada energía tratando de razonar con mi suegra y luego quemé el resto en traducir al volver del cine, y luego quemé la energía que ya no tenía. Al despertar decidí establecer un nuevo cronograma, ahora más razonable, aunque ya no me dejaría tiempo libre antes del viernes. Llamé a Fani por teléfono para cancelar los planes de los siguientes dos días (es decir ayer y hoy), le expliqué que era para poder terminar la traducción y seguir con vida, y lo entendió sin problemas. Afortunadamente la cerrazón mental no es genética.

Así pues, el martes no postee nada porque el día fue algo caótico, ayer miércoles dormí toda la mañana y traduje casi toda la tarde (con algunas pausas para comer, ir al baño, tomar café y recibir una inesperada pero siempre bien recibida visita de Fani que me ayudó a despejarme), y recién hoy me doy un tiempo para escribir antes de terminar de traducir la segunda mitad del último capítulo de la novela. En la noche a enviar la traducción terminada, dormir a pierna suelta y mañana a desconectarme por completo hasta la tarde y luego a esperar la paga.

#53

Por alguna razón extraña anoche no pude dormir bien. Me fui a dormir relativamente tarde, alrededor de las dos de la mañana, como siempre, y un par de horas después estaba nuevamente despierto. Abrí la ventana pensando que era el calor, cambié las sábanas porque había olvidado cambiarlas en la mañana, tomé un poco de agua. Más de media hora más tarde aún no podía dormir y estaba mirando el techo de la habitación y empezando a tramar historias ambientadas en un mundo casi desierto, posiblemente post-apocalíptico (la influencia de haber visto Mad Max a los ocho años). Empecé a dar vueltas de un lado a otro tratando de dormir mientras el reloj marcaba las cinco de la mañana. Lo siguiente que recuerdo es que el teléfono sonó y contesté de forma automática sin saber muy bien lo que estaba diciendo. Recuerdo que era Fani diciéndome algo de salir a caminar, y también recuerdo haber visto el reloj y que era poco más de las nueve de la mañana y los ojos me ardían. Traté de dormir un poco más, pero lo único que conseguí fue cabecear a medias hasta el mediodía.

De todas formas el día ha resultado productivo, pues he empezado una nueva traducción que me ayudará a balancear un poco las cuentas. Además le estoy enseñando a Fani a sublevarse contra su mamá, cosa que debió haber hecho hace más de diez años y que ahora puede resultar complicada, pero de todas formas es algo que debe hacer por su propio bien.

#52

En la mañana, justo después de quedar con Fani en que hoy iba a ser un día sin vernos, empecé a pensar un pequeño proyecto para ocupar el día, o al menos la tarde. Iba a escribir una aventura corta para Dungeons & Dragons, algo corto pero con historia que con el tiempo podría convertirse en una aventura más larga y épica si me animo a escribirla. Resulta que tras encontrar las referencias necesarias en alguno libros y buscar algunos referentes visuales en la web, la tarde se ha pasado sin poder avanzar nada del proyecto mismo. Creo que debo organizarme mejor, incluso para los proyectos pequeños. Al menos ahora ya tengo las referencias para poder escribir la aventura en cualquier otro momento, y eso no debería tomar más que unas horas en la mañana o en la tarde. Por cierto, si no la escribo ahora mismo es porque estoy tratando de cambiar mi horario por uno más normal, es decir, irme a dormir a una hora más o menos decente para poder levantarme temprano y hacer más cosas antes del mediodía en lugar de después de la medianoche.

Mientras tanto aprovecho para poner algunas cosas en orden, y pareciera que siempre estoy haciendo eso, pero es que vivo rodeado de una suerte de caos creativo que debe ser puesto en orden de vez en cuando para mantener un poco de cordura en el estudio.Tal vez un par de repisas más y unos revisteros pequeños para poner mis cuadernos de dibujo podrían ayudar a organizar un poco el caos, o al menos le darían algo de coherencia.

#51

Esta mañana, justo cuando estaba saliendo de la cama entre las brumas del sueño que no se terminaba de ir, se cortó la luz. Ahora que me pongo a pensarlo, la electricidad ha estado fallando mucho últimamente, al menos tres veces en los últimos cinco días. Es raro. En ese momento, sin embargo, no pensé en nada de eso, sino que empecé a cambiar mis planes uno por uno debido a la falta de electricidad. No podía ver la película que quería ver, tampoco la repetición de Big Bang Theory, no podía encender la PC para revisar el email y escanear los dibujos recientes, ni poner el cartucho de tinta nuevo en la impresora, ni llamar a ni enamorada porque no tengo saldo en el celular y su teléfono fijo es inalámbrico y depende de la electricidad (lo que me recuerda que debo preguntarle por qué no tienen un teléfono común y corriente en caso de emergencia), no podía preparar el jugo del desayuno de todos los días porque no había licuadora… recién entonces me di cuenta de cuánto dependía de la electricidad para muchas de las cosas que considero habituales en mi vida. Por cierto, no fue muy agradable darme cuenta de cuán electro-dependiente me he vuelto en los últimos años. Claro que en cuanto regresó la electricidad, todo eso se fue al cuerno porque finalmente pude encender la PC y el ventilador del estudio. Hago muchas cosas lejos de la PC, pero de alguna forma siempre dependo de la electricidad por una u otra razón.

#50

Otra entrada tardía a pesar de haberme levantado más de una hora antes de lo habitual. Debe ser que me he acostumbrado a empezar a escribir antes del mediodía pero terminar de escribir en la noche. Tengo que corregir eso, comenzando con el posteo de mañana.

Y parece que las cosas siguen mejorando en cuanto a conciertos aquí en el Perú. Claro que la cosa sería muy distinta si no estuviéramos en medio de una crisis. También es posible que de no ser por la crisis, las bandas no vinieran sino que pasaran de largo para aterrizar en otros países más rentables. Claro que en realidad es cuestión de pensarlo, porque si no estuviésemos en crisis podríamos gastar más en ver a las bandas, y con eso podrían venir más bandas, pero a la vez los demás países volverían a ser escenarios más prometedores económicamente y las bandas pasarían de largo para tocar lejos de nosotros. Esperemos que una vez que haya pasado la crisis las bandas sigan teniendo ganas de venir al Perú aunque sea de vez en cuando. No pido que Iron Maiden venga todos los años, pero sería genial si vinieran al menos un par de veces más en los próximos diez años. Este año me voy a perder a Kiss porque no puedo costear la entrada sin desbalancear mi presupuesto, y aún está por verse si puedo ir al concierto de Oasis (dicen que viene con Weezer), y tengo la esperanza de estar en condiciones de pagar una buena entrada si realmente viene AC/DC.

#49

Empezando más temprano el día de hoy, aunque sea media hora más temprano. Nada nuevo a esta hora de la mañana, salvo el hecho de que el sol ya salió con ganas y está empezando a calentar como si no hubiera mañana… si sigue calentando, quizás no lo haya. En fin, el verano ya se termina y el invierno se acerca más y más, con casacas y capuchas y mañanas frías tomando café frente a la ventana. Muchas personas piensan que el invierno es triste porque es sinónimo de lluvias, pero no hay nada de malo en una tarde de lluvia, o tomar un café viendo llover al otro lado de la ventana, o caminar bajo la lluvia con la capucha sobre la cabeza y ver los reflejos de las luces en los charcos del piso, o la forma en que la luz se difumina en la niebla. Hay magia en eso.

Hace unos días me hicieron notar que de un tiempo a esta parte he venido hablando bastante de magia en mis posteos. Realmente no me había dado cuenta, pero es cierto. Tal vez sea la influencia de haber estado leyendo y releyendo comics de Hellblazer, o tal vez sea sólo que he estado dejando volar un poco mi imaginación al momento de describir cosas de todos los días. Lo que sí sé con total seguridad es que considero que la magia es una parte importante no sólo de mi vida, sino del mundo que nos rodea, aunque no nos demos cuenta. Sólo es cuestión de prestar atención.

#48

El microondas y yo hemos sido amigos desde que lo compré hace unos meses. Incluso desde antes ya me llevaba bien con otros microondas que había encontrado en las casa de mis amigos, en otros países y en el trabajo. Ahora el microondas de la cocina es un buen amigo que acaba de salvar el almuerzo.

Y como tantas otras veces, este posteo se quedó a medias, pues lo dejé incompleto para dedicarme a otras cosas. Y todo por no empezar a escribir más temprano. Si empezara a escribir temprano podría terminar antes y tener un posteo decente listo antes del mediodía. Claro que eso implicaría levantarme más temprano, y eso a su vez implicaría acostarme más temprano, lo cual ya conspira un poco contra mi costumbre actual de quedarme despierto más allá de las dos de la mañana (muchas veces alrededor de las tres y media). Claro que si me levantase más temprano podría hacer las cosas más temprano y ya no tendría que quedarme despierto hasta tan tarde. Tal vez Fani tenga razón y deba irme a dormir antes para empezar a llevar una vida diurna que no afecte mis actividades ni mi salud. Supongo, pero no lo sabré a ciencia cierta hasta que lo intente. Tal vez esta noche me vaya a dormir siquiera un par de horas antes, para despertar un par de horas más temprano, tomar desayuno a una hora decente y publicar un posteo nuevo alrededor del mediodía. De todas formas, la cafeína seguirá siendo una parte importante de mi rutina del desayuno.

#47

Algunas veces las cosas no salen como uno quiere, lo cual es perfectamente normal según tengo entendido. Por lo tanto supongo que no hay nada de malo en que la historia que estaba escribiendo ayer haya terminado por convertirse en un enredo sin sentido. Tal vez si lo dejo olvidado por unos días pueda arreglarlo de alguna forma, o tal vez sea que la historia estaba condenada desde el principio. En fin.

Mientras trato de despejar la mente pensando en un riff nuevo que quiero probar esta noche después de cenar, me vienen imágenes de un futuro medianamente lejano en que tengo una casa propia de dos pisos, con un amplio jardín y un sótano. El sótano de esta casa de mi posible futuro sirve como sala de ensayos y estudio casero para algunas guitarras, un bajo y una batería. Obviamente es un futuro en el que gano lo suficiente como para comprar una casa así, mantener una familia y costear todos los gastos relacionados, incluyendo aislamiento acústico y aire acondicionado para el estudio (sobre todo para poder comprar no sólo los instrumentos sino los equipos necesarios, incluyendo amplificadores, micrófonos, mezcladoras, una computadora adicional y un servidor de archivos). En mi mente aparecen de pronto imágenes de dos adolescentes con guitarras eléctricas, sentados frente a una versión mayor de mí mismo con una guitarra eléctrica semi-hueca, canas en la barba y una melena más o menos domesticada, todos improvisando un blues mientras una hermosa mujer que ya pinta canas en las sienes nos observa desde un sofá.

#46

La semana empezó oficialmente hace media hora y estoy haciendo el mixtape de la semana anterior antes de ir a dormir. Es posible que no termine de escribir este posteo antes de que tenga tanto sueño que los ojos me empiecen a traicionar.

Y no terminé de escribir ni cincuenta palabras antes de empezar a morir de sueño. Ahora es poco después del medio día y el mixtape está posteado en mi otro blog desde hace unas diez horas. Hacer un mixtape cada semana fue algo que se me ocurrió de pronto, y resulta divertido hacer una recopilación de la semana con música que refleje la forma en que esa semana pasó para mí, es decir, la forma en que sentí esa semana. Y para limitar un poco el espectro de canciones de dónde escoger, hago el mixtape con catorce de las canciones que he escuchado en el Winamp durante la semana.

Una de las cosas que voy a estar haciendo esta semana es tratar de aprender el arte de preparar café tibio/mediofrío, porque necesito la cafeína pero estoy tratando de tomar menos coca-cola, al menos hasta que logre bajar el kilo que subí en las últimas dos semanas y que está saboteando otro de mis propósitos de año nuevo: volver al peso que tenía hace cinco años. Como parte de ese propósito he cambiado un poco mis hábitos alimenticios (menos carbohidratos, menos azúcar, menos grasa, más agua y fibra) y hasta he empezado a hacer un poco de ejercicio. Sólo un poco, porque soy bastante flojo para eso.

#45

Otro domingo que se va entre escuchar música, leer las noticias, revisar el mail, almorzar con la familia y hacer algunos planes para la tarde. En realidad no me quejo. No tengo de qué quejarme, salvo de la psicótica que todos los días pone en su balcón los parlantes de su equipo de sonido y luego sube el volumen hasta la estratósfera para que todo el vecindario escuche sus alabanzas evangélicas. Soy católico, y realmente no me hago muchos problemas con las creencias de los demás (salvo con aquellos que dicen tonterías), y creo que si yo respeto las creencias de los otros, los otros también deben respetar las mías. Y poner sus alabanzas a todo volumen no es respetar las creencias de los demás.

Dejando de lado esas cosas, hoy día he tenido la sensación de que tengo que hablar con una amiga a la que no veo hace mucho tiempo. No estoy seguro de por qué, pero de vez en cuando tengo sensaciones parecidas, como si de alguna forma ella tratara de comunicarse o algo así. Es raro. Espero poder comunicarme con ella, aunque sea con mensajes de texto o el messenger, porque no tengo saldo suficiente para llamarla en el celu y el teléfono de la casa no me permite llamar a celulares. Con un poco de suerte tendremos una de esas conversaciones largas que solíamos tener antes, cuando nos podíamos pasar un par de horas hablando de cualquier tontería en el messenger. Últimamente he estado pensando mucho en los "viejos tiempos", me pregunto a dónde llevará eso.