viernes, 30 de enero de 2009

#18

Dormir hasta el mediodía debería ser una exageración, algo que no debería suceder si uno se acuesta a una hora decente, y algo ante lo que los demás deben sacudir la cabeza al considerarlo inapropiado y señal de una vida desordenada. Bueno, en mi mundo eso sucede al menos una vez a la semana, porque algunas veces el tiempo simplemente se me va de las manos cuando empiezo con algún juego de video o algún libro particularmente interesante, o cuando veo películas malísimas con mis amigos. Mi vida es desordenada, claro que sí, pero creo que es un desorden más o menos sano. De todas formas los demás siguen sacudiendo la cabeza en desaprobación, pero en fin.

El culpable del desvelo de anoche fue Batman. Después de escribir en Into The Moshpit acerca del nuevo juego de Batman, decidí volver a leer Hush, simplemente porque me parece una de las mejores historias de Batman (después de Year One y The Dark Knight Returns), y cuando me di cuenta ya eran casi las cinco de la mañana. Pensé dormir hasta las diez y después llenarme de café, y lo siguiente que recuerdo es haber despertado con demasiado calor y la sensación de que ya era muy tarde y que el despertador había sonado hacía varias horas. Mis horarios han estado un poco descuadrados desde que me volví freelance, pero no me quejo, pues siento que ha regresado esa vieja sensación de estar en vacaciones permanentes, como cuando estaba en la universidad.

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